En el transcurso del día lunes 23 de agosto, la Junta de Gobierno de la Universidad Veracruzana dará a conocer la terna de candidatos y candidatas a ocupar el cargo de Rector o Rectora, en relevo de la Doctora Sara Ladrón de Guevara González, quien encabezó a la institución durante los últimos ocho años. La terna saldrá de las siguientes trece personas, todas ellas integrantes de la comunidad académica, con reconocimiento y prestigio (se enlistan por orden alfabético):
Aguilar Sánchez Martín Gerardo
Coronel Brizio Héctor Francisco
Cuevas Gayosso José Luis
De la Fuente Alonso Alejandro
Hernández González Darío Fabián
Lamothe Zavaleta Carlos
Lira Rocas Ana Beatriz
Manzo Denes Jorge
Méndez Grajales Yolanda
Narave Flores Héctor Venancio
Ojeda Callado María del Rocío
Tapia Spinoso Salvador Francisco
Vela Martínez Rafael
Independientemente de quienes integren la terna de la que finalmente saldrá la persona que habrá de conducir a la UV durante los próximos años, es importante señalar que el proceso de designación se ha llevado a cabo en estricto apego al marco institucional, con rigor y pulcritud (otra cosa es que muchas personas de la comunidad universitaria consideren que el proceso de nombramiento del Rector o Rectora debería hacerse por otros cauces, a través de una elección, por ejemplo). Hay que decirlo: la Junta de Gobierno ha hecho un magnífico trabajo en todo el proceso, incluyendo un amplio cuestionario dirigido a las y los aspirantes en el que se abordan casi todos los ámbitos de la actividad universitaria. Hay, no obstante, algunos problemas que merecen mayor atención y pronunciamientos claros: en ese sentido va este texto.
Como parte de la comunidad universitaria e integrante del Colectivo en Defensa de la Universidad Veracruzana, hace unos días compartí en las redes sociales tres preguntas, tres inquietudes, para quienes tienen la intención de dirigir a la muy querida UV. Traigo a este espacio las preguntas y argumento sobre la pertinencia de que quienes integren la terna se pronuncien al respecto, en el entendido de que se trata de un ejercicio democrático abierto a la comunidad universitaria, sin, por supuesto, ninguna implicación de otro orden.
Las tres preguntas, las tres inquietudes, son las siguientes:
- ¿Cómo piensa abordar los casos de violencia de género en la universidad?
- Detalle las acciones e iniciativas específicas para atender los problemas derivados de la pandemia de COVID-19 para cada sector: estudiantes, académicos, administrativos, directivos, etc.
- En caso de que usted sea nombrado(a) Rector o Rectora de la Universidad Veracruzana, defina con toda precisión cuánto será su salario bruto total, incluida la compensación por el cargo. Asimismo, detalle los salarios brutos totales de las personas que ocuparán los cargos en la Secretaría Académica, Secretaría de Administración y Finanzas y Secretaría de Desarrollo Institucional. Argumente sus respuestas.
Con respecto a la primera pregunta, hay que señalar que hace unos pocos días la UV ocupó amplios espacios en medios de comunicación locales y nacionales, así como en las redes sociales, debido a las expresiones de odio, misóginas y homofóbicas que profirió un profesor durante una clase en línea (fue grabado). El video en cuestión evidencia que la violencia de género sigue siendo un problema muy grave en la UV (y en otras instituciones, desde luego) y que el Protocolo para Atender la Violencia de Género no ha sido suficiente, bien porque sus medidas y acciones no tienen el alcance necesario para hacerlas eficaces, bien porque son muy burocráticas, bien porque la comunidad universitaria lo desconoce. Por la razón que sea, lo cierto es que la violencia de género es uno de los problemas más severos de la UV, de allí la importancia de que los integrantes de la terna expliquen con todo detalle y claridad sus medidas, acciones y políticas para terminar, definitivamente, con estas reprobables prácticas.
Por cuanto a la segunda pregunta se refiere, las acciones e iniciativas dirigidas a la atención de los problemas derivados de la pandemia de COVID19, es necesario que se detallen para cada sector de la comunidad universitaria, puesto que no es lo mismo el efecto en las y los estudiantes, que en el personal administrativo, en la planta académica o los mandos directivos. Inclusive, es de enorme relevancia que candidatos y candidatas a la Rectoría delineen con toda precisión su ruta crítica para los próximos años, a fin de hacer frente a los efectos de la pandemia. Toda vez que la pandemia ha sido el hecho social total que ha trastocado por completo las actividades sociales, productivas, culturales, educativas y, en general, la dinámica de nuestras sociedades, es de alta relevancia que quien pretenda conducir a la UV en los próximos años explicite con toda precisión sus planes, iniciativas, proyectos y acciones para hacer frente a las muchas y graves consecuencias de la pandemia. Inclusive, muchas personas de la comunidad UV consideramos que quien debe ocupar el cargo de Rector(a) durante los próximos cuatro años, es quien presente el mejor plan de contingencia contra la pandemia.
La tercera pregunta está relacionada con la transparencia de la próxima administración. Los sueldos, salarios, prestaciones y compensaciones de la alta burocracia universitaria no suelen ser motivo de escrutinio, si bien en tanto sujetos obligados por la normatividad no es opcional: por transparencia deben hacer pública esa información. Nada mejor que transparentar sus ingresos como posibles altos funcionarios, antes de asumir el cargo. Por supuesto, también están bajo la lupa los criterios de austeridad con los que se regiría la próxima administración universitaria, en una institución pública que, como muchas otras en el país, requiere de enormes recursos para hacer frente cabalmente a sus muchos y complejos compromisos. Si desde ahora las y los candidatos se pronuncian sobre sus criterios de política salarial de los altos mandos directivos, la comunidad universitaria se los va a agradecer, además será un gesto de apertura y confianza que bien podría ser el inicio de una venturosa gestión.
El próximo 30 de agosto la Junta de Gobierno de la UV dará a conocer quién es la persona que ocupará el cargo de Rector o Rectora. El 1º de septiembre deberá tomar posesión del cargo. Las preguntas quedan en el aire, esperamos sus respuestas.
