Violeta Núñez Rodríguez[1]
De acuerdo con datos del segundo trimestre de 2023 del Instituto Nacional de Estadística y Geografía, del total de la población ocupada en México, cuya cifra asciende a 58.5 millones de personas, 20.3 millones reciben “hasta un salario mínimo” (véase Cuadro 1). Esto significa que el 35 por ciento de la población ocupada tiene un ingreso que no rebasa los 207.44 pesos diarios (o 312.41 si se encuentra en la frontera norte del país), cifra que corresponde al salario mínimo diario.
A esta población se adicionan 20 millones que reciben “más de 1 hasta 2 salarios mínimos”, lo que implica que sumando la población ocuapada que recibe hasta un salario mínimo, cerca del 70 por ciento de la población ocupada, más de 40 millones, reciben no más de dos salarios mínimos, 414.88 pesos al día (véase Gráfica 1).
En contraste con estos datos, de acuerdo con el Manual que regula las remuneraciones de las personas servidoras públicas del Poder Judicial de la Federación para el ejercicio fiscal dos mil veintitrés, el sueldo mensual neto (que sólo representa el sueldo básico) de un ministro o una ministra es de 206,948 pesos. Por su parte, en términos mensuales, las personas que reciben hasta un salario mínimo, tendrán un ingreso de alrededor de 6,223 pesos. Esto implica que el sueldo base de 11 ministros, es 3,325 por ciento mayor al salario de 20 millones de personas que pertenecen a la población ocupada en México (véase Gráfica 2).
A esto se suma el aguinaldo de las y los ministros que de acuerdo con el Manual que regula las remuneraciones... en 2023 es de 445,309 pesos netos. En contraste, la Ley Federal del Trabajo establece un monto de 15 días de salario de aguinaldo, lo que implica que los 20 millones de trabajadores recibirán alrededor de 3,112 pesos. Estos datos muestran la gran disparidad, ya que el aguinaldo de las y los ministros es 143 veces más (lo que implica 14 mil por ciento más). Sin embargo, recordemos que de acuerdo con la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (INEGI, 2023), el 56 por ciento de la población ocupada se encuentra en informalidad laboral, lo que implica que una parte considerable de la clase trabajadora no tienen prestaciones, entre ellas el aguinaldo.
Al aguinaldo se le suma otro ingreso muy considerable, denominado “pago por riesgo”. A partir del Manual que regula las remuneraciones... en 2023, este pago se define como: “Cantidad que se otorga a las personas servidoras públicas de mando del Poder Judicial de la Federación, dada la naturaleza, complejidad y responsabilidad de las funciones que tienen encomendadas, que se confiere de conformidad con los lineamientos y montos que establezcan los Órganos de Gobierno”. De acuerdo con los datos de 2023, el monto anual neto de este rubro es de 416,754 pesos. Esto significa que entre el salario base, el aguinaldo y el pago por riesgo, las y los ministros al año tienen un ingreso de más de 3.3 millones (véase Cuadro 3), lo que implica que en promedio, las y los ministros pueden tener un ingreso de más de 9 mil pesos diarios. No olvidar, los 207.44 pesos de salario mínimo.
Sin embargo, esta cifra se incrementa para el siguiente año. De acuerdo con el Proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación 2024 (PPEF, 2024) la remuneración nominal anual neta para los ministros(as) será de 3,793,644 pesos, lo que en promedio representaría más de 10 mil pesos diarios (véase Cuadro 4). Nada tiene que ver con los sueldos de los que estamos hablando, pero no olvidemos que los mineros que quedaron sepultados en Pasta de Conchos en Coahuila, después de la explosión de la mina de Grupo México, recibían un salario de siete dólares por día, es decir, aproximadamente 128 pesos diarios (a partir del tipo de cambio actual).
Además del sueldo base, en el PPEF 2024 resaltan las prestaciones (véase Cuadro 5). Entre éstas sobresalen el aguinaldo con más de 584 mil pesos brutos, el seguro de separación individualizado con más de 520 mil pesos brutos y el pago por riesgo de más 637 mil pesos brutos. A estos rubros se agrega la prima vacacional con más de 95 mil pesos brutos, el estímulo por antigüedad de 45 mil y los seguros de gastos médicos mayores y de separación individualizada con más de 37 mil y 36 mil pesos brutos, respectivamente.
Con este nivel de ingreso, por mucho los ministros(as) de la SCJN se encuentran muy por encima de las remuneraciones de las y los diputados federales; senadores; consejero presidente y consejeros electorales del Instituto Nacional Electoral (véase Gráfica 3), quienes ya representan un enorme mundo de privilegios frente a decenas de millones de personas, y por supuesto se encuentran muy por arriba del salario mínimo, el cual si permaneciera para 2024 (aunque sabemos que se incrementará), representaría más de 5 mil por ciento el salario de las y los ministros en comparación con el salario mínimo.
Aunado a esto, como observamos en el Cuadro 6, las y los ministros son los únicos que tienen privilegios que por lo general ya no están presentes en otros espacios de la administración pública. Por ejemplo, la prima vacacional solo la mantiene la máxima autoridad del INE (consejero presidente y consejeros electorales) y las y los ministros; el seguro de vida institucional sólo ha sido retirado de la Cámara de Diputados, permaneciendo en los senadores(as), el INE y la SCJN; y los seguros de gastos médicos mayores y de separación individualizado solo permanecen en el INE y en la SCJN. Por su parte, el estimulo a la antigüedad queda exclusivamente en la corte, al igual que el pago por riesgo.
Pero esto es solo es una muestra de los enormes privilegios que durante años se fueron gestando en el Poder Judicial, porque nos son únicamente las y los ministros de la SCJN. Al interior también existen una gran cantidad de puestos de mandos superiores que incluyen no sólo sus sueldos y aguinaldos, sino asignaciones adicionales con cantidades onerosas. A ellos se suman los salarios del Consejo de la Judicatura Federal, cuya cabeza tiene los mismos privilegios que ostentan los ministros(as), con un salario mensual neto de 206,948 pesos, un aguinaldo de 445,309 pesos y un pago por riesgo de 416,754 pesos. En un escenario similar se encuentra el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, cuyo puesto de magistrado de la sala superior tienen un salario mensual neto de 201,973 pesos, un aguinaldo de 445,440 pesos y un pago por riesgo de 385,406 pesos (PJF, 2023). Definitivamente, aquí se expresa claramente la Ley General de Acumulación Capitalista… “a mayor riqueza, mayor miseria”, lo dramático es que sea en el poder encargado de impartir “justicia” en la nación mexicana.
[1] UAM-X y RV
