Federico Anaya Gallardo
Hay un dicho popular que reza ¡después de vejez, viruelas! para burlarse de quienes, ya entrados en años, se comportan juvenilmente y hacen el ridículo. Pero, para demostrarnos que los dichos populares siempre estarán a debate, allí está la gloriosa vejez de Valle-Inclán (1866-1936) quien de joven fué dandi reivindicador de la tradición y ya viejo se reveló rebelde. Más común, tristemente, es encontrar jóvenes que se rebelan sólo por enervar a quienes les rodean y viejos que, amargados y ciegos, denuncian y renuncian a la juventud como si ellos tuviesen todas las respuestas correctas.
Momentum me ha pedido varias veces comentar los recientes acontecimientos en el Estado Libre y Soberano de Nuevo León. Aparte, desde Marzo próximo pasado (ppd), ya había yo estudiado las consecuencias de la elección estadual de 2021. En la Liga 1, puedes ver el primero de mis tres artículos. Hace nueve meses describí “las desventuras de un joven gobernador tik-tokero que –como [el rey castellano] Alfonso del año mil– atacó a los moros antes de sosegar sus propias tierras”. A lo largo de estos meses, y asegún nuevas acciones de Samuel Alejandro García Sepúlveda complicaban más la situación neoleonesa, mis referencias al joven gobernador fueron cada vez más agrias. Y tenía buenas razones para eso, como resumiré enseguida. Pero también entendí que en mi crítica había mucho de adulto-centrismo; de desprecio por la inexperiencia juvenil. Con esta nota, avancemos lectora, tratando de ser objetivos.
Primero, resumamos los hechos.
En el Nuevo León de 2021 el relevo generacional se partidizó. El candidato senior fue el panista Fernando Larrazábal (n.1962, 59 años) seguido por el priísta Adrián de la Garza Santos (n.1971, 50 años) y la recién morenista Clara Luz Flores (n.1974, 47 años). Frente a ellos, el emecista García, nacido en 1987 tenía sólo 34 años… ¡25 años menos que el candidato senior! MC armó una campaña que explotó la frescura y la innovación de Samuel y la habilidad influencer de su pareja, Mariana Rodríguez Cantú (n.1995, 26 años en 2021, 28 al día de hoy –el dato es relevante).
Pese a esto, como argumenté desde hace meses, ni la juventud ni el ingenio en campaña fueron la causa del triunfo naranja en Nuevo León. MORENA se desbarrancó por un escándalo que demostró la falta de ética de su candidata (que estuvo ligada a la secta de Keith Raniere). Esta debacle no fue aprovechada ni por el PAN (que nunca salió del tercer lugar) ni por el PRI (que sólo momentáneamente fue puntero).
Recordemos los resultados: García (MC) triunfa con 37%. Garza (PRI) queda segundo con 28%. En tercero Larrazábal (PAN) con 18% y Flores (MORENA) en cuarto con 14%. La participación fue de 51% del padrón. La victoria naranja fue la del tercio más grande con una dispersión muy fuerte de los votantes.
¿Y el Congreso?
La elección de 2021 dejó una legislatura dividida. Pese a ello, los partidos más antiguos, como han construido redes de interés más profundas en regiones y municipios, tuvieron más éxito que el recién llegado MC. El congreso neoleonés tiene 42 curules. Los comicios de 2021 dejaron 16 para el PAN (38%), 14 para el PRI (33%), 6 para MC (14%) y dos (5%) para cada uno de los siguientes partidos: MORENA, Verde y Nueva Alianza. Es decir, la misma ciudadanía que dio Palacio de Gobierno a García con 37% del voto, sólo le concedió 14% del Congreso. Aparte, a nivel nacional, PRI y PAN ya habían proclamado su alianza conservadora contra MORENA. Es decir, estos resultados también pueden leerse como un mandato democrático de los neoleoneses a favor de los conservadores, quienes juntos sumaban 71% de la Legislatura.
Entre 2021 y 2023 varias legisladoras han cambiado de afiliación. De acuerdo con la página www de la LXXVI Legislatura neoleonesa (Liga 1), al día de hoy el PAN tiene sólo 13 curules (tres menos), el PRI tiene 14 (igual) mientras que el MC tiene 11 (cinco más). Nueva Alianza ha desaparecido (dos menos), MORENA sólo tiene dos diputadas (igual), mientras que el Verde sólo tiene uno (uno menos). Hay una curul vacía –sujeta a litigio.
Lectora: si comparas esta última composición con la que reporté en este mismo espacio en Marzo pasado verás que los bloques parlamentarios pelean con uñas y dientes la lealtad de cada persona legisladora. Quienes se sumaron a la bancada de MC lo hicieron atraídos por las promesas del gobernador García (Liga 2). Ha habido renuncias inexplicables (Liga 3), atribuidas por el PRIAN a presiones ilegítimas del gobernador, y hasta muertes inoportunas (Liga 4).
Por otra parte, en la elección de 2021 el PRI ganó 14 presidencias municipales; el PAN 16; MC 6; Verde 5; Nueva Alianza 5; MORENA 3; quedando dos ayuntamientos en manos de independientes. La simple aritmética nos muestra que los partidos tradicionales de Nuevo León siguen controlando este nivel de gobierno (30 de 51 ayuntamientos). Aquí está la raíz de los pleitos entre el ejecutivo y el legislativo neoleoneses por la aprobación del presupuesto –confrontación que llevó a iniciar juicios políticos contra el gobernador y su secretario general de Gobierno.
Peor: de los trece municipios que forman el área metropolitana de Monterrey, MC sólo ganó tres ayuntamientos (población: 1’616,082), contra cuatro del PRI (población: 1’927,914) y tres del PAN (población: 802,160). La confluencia de estos dos últimos deja al gobernador con adversarios potenciales en siete de estos trece ayuntamientos. Un análisis muy superficial indica que en la metrópoli regia dos de cada tres habitantes están bajo un gobierno adversario al partido del gobernador.
Ahora bien, ¿la crisis neoleonesa se debe solamente a la imprudencia juvenil del gobernador quien –obviamente– no reconoció el mandato contradictorio de las urnas en 2021?
Esta parece ser la posición de Javier Sicilia, quien publicó en Proceso una opinión titulada “Samuel y lo monstruoso”. (Liga 5.) Como siempre, vale la pena leer a las buenas plumas. Pero no te engañes, lectora. Don Javier ha perdido la templanza con la que nos encantó hace tres lustros.
Sicilia señala correctamente el peso de la actual tecnología de comunicación en el fenómeno Samuel García. Pero en lugar de analizar, juzga como inquisidor. Stephen Fry correctamente acusa al catolicismo (el de ayer y el de hoy) de ser peligrosamente dogmático. (Liga 6.) Y Sicilia es esencialmente, el más conspicuo de los católicos mexicanos. Sicilia truena contra el gobernador neoleonés diciendo que “el mundo de los sistemas y las imbecilidades que produce embrujan cada vez más las mentes”, como si todo fuera obra de un “Maligno” que hechiza. Sicilia, ya transmutado en oscuro inquisidor, expande su acusación de “brujería” a cientos de miles de ciudadanas y ciudadanos: “las redes de Mariana [Rodríguez Cantú] no dejan de acoger bovinamente sus múltiples idioteces”. Acusa de inanes, es decir, de vanos, insustanciales é inútiles (según los académicos de la monarquía) a “los millones de votantes que se conglomeran [al] alrededor” de los “abominables” populistas. Para Sicilia, Samuel García es sólo uno más de esos monstruos populistas que han aprendido a “reinar en medio del caos”.
Cuando el poeta, al que admiramos en su serenidad ante el dolor, usa tres veces la palabra imbécil para definir a sus adversarios en sólo siete párrafos, sabemos que se ha puesto ya la toga del inquisidor. Que –como Tomás Moro– ha abandonado el debate y llama ahora a quemar herejes.
Peor: En las imágenes que Proceso agregó al artículo de Sicilia sus editores incluyeron una foto del recinto de la Legislatura neoleonesa, con este pié de foto: “Cámara de Diputados de Nuevo León. Freno real.” Los inquisidores hablan siempre en absolutos. Sicilia y Proceso omiten explicarnos por qué la ciudadanía neoleonesa dió mayoría al PRIAN en el legislativo estadual y en los municipios pero prefirió a Samuel García para gobernador. Sicilia sólo nos dice que “en el mundo de las redes y el algoritmo, la imbecilidad reina”. ¿Qué solución habría, entonces?
La respuesta de los conservadores (adonde hoy militan Sicilia y Proceso) es que, como las mayorías son imbéciles y se dejan embrujar por el populismo, hay que restringir sus derechos democráticos. En 2022 se opusieron a la Revocatoria y a la Consulta Ciudadana. Hoy elogian a la Suprema Corte como poder contra-mayoritario (que no debiera ser) y creen que la super-mayoría del PRIAN en Monterrey es un freno al “abuso” demagógico.
Ojalá nuestra vejez no sea como la de Sicilia.
Ligas usadas en este texto:
Liga 1:
https://www.hcnl.gob.mx/organizacion/diputados.php
Liga 2:
Liga 3:
Liga 4:
https://www.sdpnoticias.com/opinion/la-mafia-o-la-mala-suerte-esta-atacando-al-pan-de-nuevo-leon/
Liga 5:
https://www.proceso.com.mx/opinion/2023/12/8/samuel-lo-monstruoso-320014.html
Liga 6:
https://fb.watch/oQhL2owOYU/?mibextid=2Rb1fB
