Los pactos de Coahuila

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Federico Anaya Gallardo

 

El final del año político 2023 tuvo entre sus estelares los escándalos ocurridos en el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) y en el pleno de comisionados del Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI). Cabe aclarar que frente a ambos espectáculos los comentaristas de Derecha subrayaron mucho más la designación de la nueva ministra de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) –insistiendo en la “maldad obradorista” que busca politizar los espacios en que “debiese imperar la neutralidad política é ideológica”.

 

El nueve de Enero de este año nuevo de 2024, Marko Cortés Mendoza (n.1977) nos regaló la confirmación de nuestras más conspiranóicas sospechas acerca de los arreglos nefastos entre el PRI y el PAN. En su cuenta de Twitter/X el dirigente nacional del PAN (@MarkoCortes) reclamó al recién llegado gobernador constitucional de Coahuila de Zaragoza, Manolo Jiménez Salinas (PRI, n.1984, @manolojim) por no cumplir con el acuerdo de coalición electoral que lo llevó al triunfo en la elección estadual del año pasado. Junto su amargo trino, el blanquiazul agregó dos páginas que muestran los “goodies” que el PRI prometió al PAN a cambio de conducir y siglar la gubernatura de Coahuila en 2023. (El verbo “siglar” no lo reconocen los monárquicos Académicos de la Lengua Castellana, pero supongo que quiere decir que los candidatos designados llevan la “sigla” del partido “siglador”.) (Puedes ver el trino y el documento en la Liga 1.)

 

¡Buen material para empezar este gran año electoral! Lo más interesante del pacto inconfesable-pero-tuiteado es que PRI y PAN se repartieron no sólo carteras en el poder ejecutivo –sino también órganos autónomos y al menos un puesto en la judicatura del Estado. De acuerdo al documento trinado por Cortés, al blanquiazul te tocaría el “Instituto de Transparencia” (en realidad se llama Instituto Coahuilense de Acceso a la Información Pública) y la “Ratificación de Bernardo con Magistrado”.

 

El único Bernardo que aparece hoy en la judicatura coahuilense es Bernardo González Morales (n.1975). Es uno de 23 magistrados que forman el Poder Judicial del Estado de Coahuila de Zaragoza (PJECZ). (Liga 2.) Veamos el caso González Morales con un poco de detalle. Es relevante porque –recordemos– priístas y panistas se han desgarrado las vestiduras por la militancia partidista de Lenia Batres Guadarrama, nueva ministra de la SCJN. Más pronto cae un hablador que un cojo, decía mi abuela Lola.

 

De acuerdo con el Artículo 136 de la Constitución del Estado (Liga 3), el PJECZ se forma por el Pleno del Tribunal Superior de Justicia (actualmente de 11 magistrados), la Sala Regional de La Laguna (5 magistrados, cuyo presidente se sienta en el pleno del Ttribunal Superior), cuatro tribunales distritales (cada uno con un magistrado al frente) y el Tribunal de Conciliación y Arbitraje (con 3 magistrados). Ni los magistrados distritales ni los de conciliación-arbitraje se sientan en el pleno.

 

¿Cómo se designa a los magistrados coahuilenses? Existe un Consejo de la Judicatura, presidido por la cabeza del Tribunal Superior y con representantes del ejecutivo, legislativo y de las personas juzgadoras. Ese consejo propone ternas (ó listas) al gobernador del Estado para los nuevos nombramientos. El gobernador escoge un nombre y lo envía al Congreso del Estado –y éste elige por mayoría de dos tercios de los presentes. Es decir: 17 de las 25 personas legisladoras que forman la legislatura de Saltillo, si todos están presentes. (Importante: la constitución coahuilense dice que, si la Legislatura no decide, la persona propuesta queda como magistrado provisionalmente hasta el siguiente periodo de sesiones. Y si vuelve a ocurrir que no decida el legislativo, el nombramiento se vuelve definitivo. Una regla notoriamente a favor del poder ejecutivo que data de la época de mi general Calles.)

 

Bernardo González Morales es abogado por la Universidad Iberoamericana de Torreón y litigó para una empresa de petro-equipos y dos despachos particulares en la segunda parte de la década de los 1990s. Desde 1999 milita en el PAN, organización en la que trabajó desde ese año y hasta 2002 –cuando entra a la Secretaría de Desarrollo Social federal. Trabajó en la SEDESOL panista (Administraciones Fox y Calderón) hasta 2010, año en que retorna al PAN como secretario general de ese instituto en Coahuila. De 2014 a 2019 fue presidente del PAN coahuilense. Podemos apreciar que se trata de una carrera típica para un cuadro panista. (Liga 4.)

 

Lo cual hace aún más extraño que, en 2019, el nombre de González Morales haya sido incluido en la lista que el Consejo de la Judicatura envió al gobernador Miguel Ángel Riquelme Solís (del PRI). El dirigente estadual panista había sido un crítico mordaz y duro del gobernador, cuya elección impugnó. El líder blanquiazul llamaba espurio a Riquelme desde la jornada electoral de 2017. Pese a eso, no sólo fue incluído en la lista por un Consejo de la Judicatura dominado por el PRI, sino escogido por el gobernador tricolor como su propuesta. La LXI (61) Legislatura lo aprobó el 12 de Febrero de 2020.

 

No fue tan sencillo. ¿Cómo logró el priísta Riquelme la mayoría calificada de 2/3 para hacer magistrado laboral al panista González? En la 61 Legislatura coahuilense (2017-2020), de 25 curules, el PRI apenas tenía 10 personas legisladoras. El segundo grupo parlamentario era el PAN con 9 legisladoras. Las seis curules restantes se repartían 3 para la Unión Democrática de Coahuila (UDC), 2 para MORENA y 1 para el PRD.

 

Por lo mismo, Riquelme encontró más cómodo hacer el nombramiento de González Morales en la Diputación Permanente, que sólo tiene 11 personas. En el momento en que se votó al magistrado González Morales la Diputación Permanente estaba compuesta del modo siguiente: PRI (3), PAN (3), UDC (2), MORENA (2) y PRD (1). Ernesto Acosta reportó, para 12-SuperChannel de Piedras Negras del 12 de Febrero de 2020, que el panista tuvo 10 votos a favor y una abstención. (Liga 5.) La minuta de esa sesión de la Diputación Permanente registró unanimidad. (Liga 6.)

 

De acuerdo con Carlos Arredondo Sibajá, en un reporte del 27 de Febrero de 2020 para La Vanguardia de Saltillo titulado “Se ocupa magistrado indecente”, González Morales no era el primer panista beneficiado de este modo. (Liga 7.) En el mismo caso estarían los magistrados regionales Carlos de Lara Macgrath y  Ulises G. Hernández Torres. Este último, aparte, es magistrado presidente de los regionales. Ambos tienen carrera profesional en Torreón.

 

Arredondo Sibajá señalaba hace cuatro años que “la razón para la ‘diversidad’ en las propuestas para el Poder Judicial en los últimos años parece evidente: al haber perdido el control del Congreso del Estado, la minoría priista se ha visto obligada a ‘ceder espacios’ a la oposición y ésta, ni tarda ni perezosa, ha decidido aceptarlos.” Nosotros sabemos que en realidad se estaba fincando la alianza bipartidista entre PRI y PAN que aseguró la victoria en las elecciones legislativas y de gobernador en 2023. Lo que estamos viendo en 2024 es más bien cómo se asienta esa alianza y cuál de los socios es el dominante.

 

Me he detenido en el caso de la “Ratificación de Bernardo con Magistrado” porque nos permite apreciar, lectora, que en Coahuila las negociaciones entre PAN y PRI para formar un frente electoral único frente a la amenaza de la Izquierda tiene ya años fraguándose é incluye posiciones en los tres niveles de gobierno (federal, estadual y municipal) así como en todos los poderes del Estado (los tres tradicionales y los órganos constitucionales autónomos).

 

Hace seis meses abordé en este espacio las complejidades de la política electoral coahuilense, señalando que las cosas eran más complicadas que la división de la Izquierda entre las candidaturas de MORENA (Guadiana, hoy ya fallecido) y PT (Mejía Berdeja, hoy de regreso en el redil obradorista) ante la coalición conservadora del PRI y PAN. Los reclamos de Marko Cortés Mendoza al gobernador prianista ya electo y ya en funciones, Manolo Jiménez Salinas, nos indican que no todo ha sido coser y cantar en el lado oscuro de la Fuerza.

 

Aparte, bien nos viene empezar el año mostrando la hipocresía de la comentocracia conservadora mexicana. Se desgañitó atacando a Lenia Batres Guadarrama, una abogada que con sinceridad se reconoce obradorista y aplica su credo político con transparencia al llegar a la Suprema Corte de Justicia de la Nación. Pero ha guardado ominoso silencio con arreglos como el que hoy te he comentado aquí. Sólo hasta que el dirigente nacional del PAN evidenció la negociación a través del trino del 9 de Enero de 2024 fue que la prensa conservadora denunció esta negociación. (Véase la nota de Animal Político en la Liga 8.) Pero como hemos visto, la transacción viene de años antes.

 

Ligas usadas en este texto:

 

Liga 1:

https://twitter.com/MarkoCortes/status/1744797764582621680

 

Liga 2:

https://www.pjecz.gob.mx/magistrados/

 

Liga 3:

https://www.congresocoahuila.gob.mx/transparencia/03/Leyes_Coahuila/coa01.pdf

 

Liga 4:

https://www.pjecz.gob.mx/magistrados/bernardo-gonzalez-morales/

 

Liga 5:

https://superchannel12.com/386047/

 

Liga 6:

https://view.officeapps.live.com/op/view.aspx?src=https%3A%2F%2Fwww.congresocoahuila.gob.mx%2Ftransparencia%2F03%2FGACETA-PARLAMENTARIA%2F20200214_PPRS07.docx&wdOrigin=BROWSELINK

 

Liga 7:

https://vanguardia.com.mx/opinion/politicon/se-ocupa-magistrado-indecente-coahuila-LNVG3509460

 

Liga 8:

https://www.animalpolitico.com/verificacion-de-hechos/te-explico/coahuila-nombramientos-pan-pri

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