El problema de los pensionados en México
Por Matías Ortega
En febrero de este año, el presidente Enrique Peña Nieto presentó una iniciativa de reforma al Pensionissste que pretendía convertirla en empresa de participación estatal mayoritaria, con lo que se abrirían a la banca privada el 49% de las pensiones. Esta reforma, según denuncias de la diputada Araceli Damián, permitiría repartir los rendimientos del fondo entre los accionistas privados en lugar de que se reinviertan obligatoriamente en las cuentas de los trabajadores.
Este miércoles se distribuyó un dictamen con cambios a la reforma del Pensionissste y apenas una hora después, con un obvio desconocimiento del nuevo documento, se aprobó el dictamen en la Comisión de Hacienda con votos del PRI, PAN, Verde y Nueva Alianza.
Los cambios, entre otras cosas, convierten al Pensionissste en una empresa paraestatal 100% del gobierno, con lo que se dan facultades al Ejecutivo federal de decretar su liquidación en cualquier momento, como fue el caso de Luz y Fuerza del Centro. Además, será el presidente de la República quien nombre a los nueve representantes de los trabajadores en el Consejo de Administración.
Ante esta situación, es importante recordar que este martes 1 de diciembre, la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OECD) publicó el Panorama de las Pensiones 2015. En esta décima edición, se revisan las reformas pensionarias realizadas en los últimos dos años por los países de la OCDE (por sus siglas en inglés) y del G-20.
Se publicó también, por primera vez, un documento análogo que aborda específicamente a los 26 países de América Latina y el Caribe (ALC). El informe menciona que el mayor desafío que enfrentan las políticas de pensiones es la baja cobertura de sus sistemas. Además menciona que los indicadores demográficos relevantes para la política de pensiones son: las tasas de fecundidad, la esperanza de vida y las tasas de dependencia en la vejez.
En los países de ALC, sólo 45 de cada 100 trabajadores contribuyen o están afiliados a un plan de pensiones. En México, el porcentaje de cotizantes es de 30%, lo cual significa que 7 de cada 10 mexicanos no tendrán un ahorro para el retiro. Según el reporte, el nivel de educación tiene un impacto significativo en los aportes a las pensiones.
México está dentro de los países de la OCDE con las pensiones más bajas. Los jubilados mexicanos solo perciben un 27% de lo que ganaban en su edad laboral, en contraste con el 111% que perciben en Turquía. En el informe, México también es mencionado como uno de los países con más altas tasas de pobreza entre las personas de la tercera edad y bajos beneficios sociales.
Pese a esto, la tasa de empleo promedio de personas entre 55 y 64 años de edad aumentó 7 puntos porcentuales. Sin embargo, en varios países la edad promedio de salida del mercado laboral se mantiene muy por debajo de las edades de jubilación normales, siendo México de los países donde los trabajadores permanecen más tiempo en el mercado laboral.
Como estrategias para lidiar con los problemas de cobertura de pensiones, el informe indica que la política que parece estar teniendo el mayor impacto es la extensión de las pensiones sociales. Paralelamente, refiere que es importante aumentar la formalidad en el mercado de trabajo y mejorar la participación de las mujeres en la fuerza laboral.
El informe de la OCDE puede consultarse en el siguiente enlace:
Panorama de las Pensiones: América Latina y el Caribe 2015
http://www.oecd-ilibrary.org/docserver/download/8114184e.pdf?expires=1449248496&id=id&accname=guest&checksum=02D9F4CA027103AD254A1D2B432A80D9
Resumen en español. Panorama de las pensiones 2015
http://www.oecd-ilibrary.org/docserver/download/pension_glance-2015-sum-es.pdf?expires=1449248405&id=id&accname=guest&checksum=FC2DE77E5BECC9234820884E2C415543
