Discute CIDH caso de desaparición forzada por militares en México
Luz León
Por primera vez un caso de desaparición forzada cometida por militares en México fue llevado a audiencia en la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).
La CIDH, con sede en Costa Rica, empezó a discutir un caso de 2009, cuando un convoy de militares detuvo a Nitza Alvarado Espinoza, Rocío Irene Alvarado Reyes y José Ángel Alvarado Reyes, quienes desde entonces desaparecieron en el ejido Benito Juárez, municipio de Buenaventura, en Chihuahua.
Hasta después de cinco años de lo ocurrido, las autoridades realizaron las primeras acciones de búsqueda, pese a que el caso es conocido en al menos 12 instancias. Por el contrario, los familiares de las víctimas han sido revictimizados, criminalizados, hostigados y amenazados, razón por la que han tenido que desplazarse forzadamente varias veces en el país. Al menos 11 de los familiares se vieron en la necesidad de pedir asilo político en Estados Unidos.
Durante la audiencia, la responsable de la investigación por parte de la Procuraduría General de la República (PGR), Marina Colín Ayala, aseguró: "No hay indicios para determinar que elementos del Estado participaran en la desaparición forzada, sino que fueron elementos del crimen organizado vestidos de militares quienes la cometieron".
María de Jesús Alvarado Espinoza y Jaime Alvarado Herrera, hermanos de Nitza y José Ángel, pidieron a la Corte que el caso no quede impune, en tanto que señalaron que "ha sido una lucha de ocho años, quiero que sean castigados los responsables, porque hasta el momento el gobierno sigue protegiendo a los que hicieron esto. El gobierno no quiere hacer su trabajo".
El día de hoy se presentarán los alegatos finales de las partes relacionadas con el caso y tendrán un mes para presentar los argumentos finales por escrito. Luego de esto, los jueces analizarán la posibilidad de dictar una sentencia.
Foto: Centro de Derechos Humanos de las Mujeres (CEDEHM)
