La Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) ordenó a México fortalecer los organismos del Estado para luchar en contra de la tortura sexual en el país. Según datos oficiales, 8 de cada 10 mujeres detenidas en el país sufren algún grado de tortura sexual contra su persona.
A partir de 2015 se creó un mecanismo interinstitucional coordinado por la Comisión Nacional para Prevenir y Erradicar la Violencia contra las Mujeres.
La liberación de Mónica Esparza acusada de secuestro y manejo de armas del uso exclusivo del ejército junto con otros miembros de su familia, recuerdan la victimización y abuso de poder que sucede dentro de los centros de reclusión en México. Esparza, no cometió dichos delitos pero fue víctima de tortura sexual.