"Ayotzinapa se ha convertido en una prueba de fuego que de no resolverse daría al traste con parte de la credibilidad y legitimidad actual del Ejecutivo, lo que también es responsabilidad de los otros poderes y de la FGR, pero sólo se moverán a fuerza de presión social...".
Conéctate con la reflexión de Omar García, exvocero de los normalistas de Ayotzinapa.