Los tres sujetos que asaltaron la Casa de la Moneda el martes por la mañana continúan en la Ciudad de México, señaló el secretario de Seguridad Ciudadana, Jesús Orta Martínez.
Las declaraciones del Orta Martínez se refieren a los tres barones de entre 25 y 30 años que robaron, en tan sólo ocho minutos, mil 567 centenarios, con un valor estimado de 50 millones de pesos. Así como relojes de colección con valor indeterminado.
El jefe de la policía capitalina notificó que los protocolos de seguridad del personal de la Casa de la Moneda fallaron esa mañana, ya que a esa hora, entre las 9:30 y las 9:40 de la mañana, el edificio perteneciente a la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) aún no abría sus puertas al público.
La SSC confirmó tres características extrañas del suceso: “de entrada el que se hayan metido con mucha facilidad siendo que el establecimiento todavía no estaba abierto, segundo que se van directo a una bóveda que estaba abierta y que eso es lo que permite al final del día que se haga esto con mucha facilidad y con un tiempo muy corto, y pues evidentemente que había empleados en el lugar que investigar”, señaló.
Los extraños elementos que se han dado a conocer han levantado especulaciones sobre una posible complicidad entre algunos empleados y los ladrones. Sin embargo, no se ha confirmado ninguna de las sospechas.
Además, Jesús Orta aseguró: “no vamos a dejar el tema porque tenemos la consigna de detenerlos... están en el interior de la Ciudad, pero prefiero no comentar más al respecto para no entorpecer la búsqueda que estamos haciendo”.
El caso es investigado por la Fiscalía General de la República (FGR), organismo que puso bajo custodia para investigación al vigilante y al menos a ocho empleados más.
Los hombres que ingresaron a las oficinas para cometer el robo sometieron a dos hombres y tres mujeres, mientras uno se quedó en la puerta del edificio para vigilar.