El presidente Andrés Manuel López Obrador manifestó su desacuerdo ante las acciones efectuadas ayer por el subsecretario de Gobernación, Ricardo Peralta, en relación a su reunión con grupos de autodefensa, insistiendo en que estos no operan dentro del marco de la Constitución Mexicana.
El día de ayer dicho funcionario acudió al municipio de La Huacana, Michoacán, donde participó colocando la primera piedra de la construcción de una planta agroindustrial.
Según el presidente López Obrador, el funcionario “tomó esa decisión porque lo invitaron a participar". No obstante, al ser cuestionado sobre este acto durante su conferencia de prensa este jueves, contestó que no estaba de acuerdo con la forma de actuar del subsecretario.
Ante esto, informó que “ya se habló del asunto en el gabinete de seguridad y se le ha pedido (al subsecretario) ajustarse a lo que establece la Constitución y las leyes”.
De esta forma, resaltó su postura de no promover a los grupos de autodefensa, ya que no lo considera conveniente. Además, señaló que estos “grupos fueron auspiciados por el propio gobierno”, y agregó que “no puede haber grupos ilegales haciendo funciones de seguridad pública, eso demuestra una incapacidad del Estado para atender la demanda de seguridad (...) Es un cumplimiento del deber del Estado y nosotros no vamos a incumplir con nuestras responsabilidades legales”.
Los grupos de autodefensa surgieron el 24 de febrero de 2013 en Michoacán, tras el hartazgo que sufrían los pobladores de las comunidades debido a los constantes acosos y violaciones de los derechos humanos por parte del crimen organizado en los últimos años, específicamente por Los Caballeros Templarios.
A pesar de que las primeras organizaciones de defensa comunitaria registradas en México datan de la década de los noventa, la proliferación territorial y mediática de autodefensas en los últimos años ha sido ocasionada por el incremento de violencia e inseguridad, así como de la imposibilidad del Estado mexicano de ofrecer seguridad y vías legales eficientes para resolver los crímenes.
Luego de ser liberado tras casi tres años de prisión y una posterior estancia hospitalizado, uno de los líderes más representativos de las autodefensas de Michoacán, José Manuel Mireles, señaló que levantarse en armas como lo hicieron no fue lo correcto, ya que “los civiles no tenemos porque andar tomando la ley en nuestras manos (...) no tenemos porque levantarnos en armas”. Sin embargo, enfatizó que los alzamientos se ocasionaron debido a que las autoridades no cumplieron con su labor de garantizar la seguridad y aplicar la ley.
