“Todo México es una fosa común, el presidente tiene miedo de declararlo. En todas partes hay desaparecidos y ejecutados”, fueron las palabras de Margarita López, una de las 41 madres provenientes de varios estados del país que realizaron una huelga de hambre para exigir a las autoridades que los cuerpos recuperados de fosas clandestinas, por ellas mismas, sean identificados y entregados a sus familiares.
Conoce algunas de las irrergularidades que varias madres y familiares de personas desaparecidas han soportado durante los últimos años por parte de la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas.