A dos años de que se desconoce el paradero de César Duarte Jáquez, exgobernador de Chihuahua, un juez federal con sede en Morelos autorizó su captura a la Fiscalía del estado, a la División de Fuerzas Estatales de la Comisión Estatal de Seguridad, la Policía de Investigación y al agente del Ministerio Público.
Asimismo, la circular se hizo extensiva a la Fiscalía General de la República (FGR) y a sus diversos órganos internos, entre los que se encuentra la Dirección General de Procedimientos Internacionales, la Dirección General de Asuntos Policiales Internacionales, la Interpol y la Fiscalía del Estados de México, según Excélsior.
De acuerdo con un documento de la FGR, César Duarte ya no puede beneficiarse de algún amparo para evitar las acciones de las autoridades ni a nivel estatal ni federal. Es así que el exmandatario deberá enfrentar una denuncia por los delitos federales de operaciones con recursos de procedencia ilícita, delitos electorales y defraudación fiscal, al tiempo que se le señaló de haber cometido peculado por un monto de al menos mil 200 millones de pesos.
“Se han comprobado en lo que están en las carpetas ya judicializadas más de mil 200 millones de pesos ahí acreditados en cuanto a los montos del desvío o la afectación que sufrió el erario estatal“, aseguró el secretario de Gobierno de Chihuahua, César Jáuregui, en diciembre de 2017.
Utilizó al menos 379 millones de pesos en efectivo a través de un contrato simulado a Asesoria y Servicios Online, S.A. de C.V., que se localizaba en el local de Manzil Construcciones, en la capital del estado, para pagar el voto de diputados locales, deudas del gobierno, servicios legales y la campaña del PRI en 2016. Antonio Tarín García, entonces director de Adquisiciones del Gobierno estatal, quien está en prisión, enviaba a personas de su confianza por el dinero y se lo llevaban en cajas a su oficina, según un testigo colaborador en la administración de Duarte.
