Los asesinatos de líderes sociales y activistas han aumentado en el país, al tiempo que las principales víctimas de la guerra son las mujeres, estudiantes y niños. Frente a las balas y la impunidad, las familias de las víctimas muestran que lo que queda es la organización y la desobediencia civil.
Conoce la reflexión de Pietro Ameglio, profesor de la UNAM y miembro de SERPAJ-Morelos y del Movimiento por la Paz con Justicia y Dignidad.
