La Casa Blanca justificó la decisión de no hacer público el informe demócrata, ya que "contiene abundante material clasificado y pasajes especialmente sensibles", además de que el Departamento de Justicia había encontrado en él información que de ser dada a conocer, "crearía preocupaciones especialmente significativas para la seguridad nacional y el interés en la aplicación de la ley”.
Por su parte el memorando republicano publicado la semana pasada, acusa de parcialidad al FBI y al Departamento de Justicia en la investigación federal sobre la supuesta intromisión rusa en las elecciones de 2016.
La minoría demócrata en la Cámara calificó al informe republicano como “un vergonzoso esfuerzo por desacreditar al FBI”, y James Comey, ex director del FBI destituido por Trump denunció que el documento es "deshonesto y engañoso".